Porque apenas nos damos tiempo-espacio para estar callados y quedarnos quietos.
Las prisas y la inercia de la vida nos atrapan.
El silencio y la meditación nos ayuda a recuperar el centro de uno mismo y a alinearse con lo que importa.
Los miércoles y los jueves a las 20,00h en BerriOna.
Media hora para el silenciamiento.