Este pasado viernes 13 en el Café Tertulia de este mes de diciembre, Enrique Goikoetxea nos presentó el tema de la oración.
La oración como esa experiencia creyente que nos abre a lo Trascendente, al Misterio, a Dios. Que poniendo los pies en la tierra nos levanta los ojos al cielo.
La oración -nos dijo el ponente- es un espacio, una escucha y un encuentro.
--Un espacio en el que habita el misterio de Dios y que nos descubre la riqueza que poseemos, el tesoro escondido, la perla preciosa, la fuerza que procede del silencio.
--Una escucha. Porque solo hay que pararse, callar, y escuchar. La escucha necesita del silencio. Un silencio que no es mutismo sino saboreo consciente y detenido.
--Un encuentro. Conmigo mismo: sencilla mente sé. Con el misterio de Dios; a ese que se llega con el corazón. Porque como decía M Unamuno -nos dijo- “con la razón solo se llega a la idea de Dios, no a Dios mismo”.
La oración es un impulso que va más allá de nosotros mismos.
Porque orar es optar por vivir nuestra vida de otro modo, por vivir de forma atenta y consciente con pleno sentido nuestra existencia, cada acontecimiento de nuestra existencia.
Pero orar ¿cómo? Nos preguntábamos.
En primer lugar: adoptando unas actitudes de coraje y escucha para ir a una cita de encuentro donde voy a poner mi vida bajo la presencia de Dios. Lo primero es: decidirme.
En segundo lugar: estar sin decir nada. En silencio interior. De ese silencio surgirá una palabra, una emoción, un sentimiento, una experiencia que me habla, … Y quedarnos sencillamente a la espera del que “está en lo secreto”.
En tercer lugar, hago un acto de sumergirme en el fondo de mi ser deseando encontrarme con mi vida dándole sentido y plenitud. Al tiempo que me dejo afectar por el Misterio que llamamos Dios.
En cuarto lugar: La oración me devuelve de nuevo a la vida, a los compromisos diarios, a los conflictos, a los dolores del mundo y de las personas, a los pobres. Dándome una mirada nueva.
Y en quinto lugar: En comunidad, poniendo el Evangelio de Jesús en el centro.
Partiendo de diversas citas de pensadores y autores, Enrique nos trasmitió también su experiencia de oración personal y comunitaria.
Las reflexiones y aportaciones de los/las participantes dieron por finalizado nueva sesión de nuestros Cafés Tertulia en BerriOna.
Los próximos tres Cafés tertulia estarán dedicados a compartir aquellas experiencias fuertes de la vida que nos ponen en una situación especial y nos abren a nuevos valores y nos hacen “mirar al cielo”. El perdón, el duelo, los cuidados.
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Próximo CaféTertulia con Sara Buesa. Con el título: “El perdón, peregrinaje interior que transforma y trasciende”. Sera el viernes 10 de Enero 2025.