Lo hemos oído muchas veces y, aún pareciendo tan claro y sencillo, sin embargo parece que nos cuesta entenderlo y sobre todo… vivirlo.
Jesús quiere simplificar. Quedarse solo con lo más sencillo pero con lo más importante.
Y ante la pregunta que le hace el escriba de ¿Cuál es el mandamiento más importante?, de ¿Qué es lo primero que hay que hacer en la vida para acertar?
Jesús responde: Un solo mandamiento o mejor dos en uno.
Pero, y esto es muy importante, no nos entrega dos número o dos leyes, sino… dos rostros.
Todos sabemos que cuando nos dan números, estadísticas del paro, de víctimas, de muertes,… no nos conmueven tanto como cuando a esos números les ponemos rostros ¿verdad?
Lo que Jesús nos pide es cambiar la mirada. Para mirar la realidad con otros ojos. Los ojos de la compasión, de la misericordia, del perdón, de la justicia, del…amor.
Respondió Jesús: “El primero es: Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, con toda tu alma, con toda tu mente, con todo tu ser” Y el 2º es éste: “Amarás a tu prójimo como a ti mismo”
No hay otro (en singular) mayor que estos (plural).
Es uno solo y el primero. No porque esté a la cabeza de la lista.
Jesús no lo pone en la cabeza sino en el corazón.
Dice el Evangelio que Jesús respondió bien (“Muy bien Maestro, tienes razón…”)
Y también el letrado responde bien (pues Jesús le dice: “Has respondido sensatamente. No estás lejos del Reino de Dios”)
Y cuando yo hoy leía este pasaje del evangelio y me planteaba y examinaba mi vida preguntándome: “Y yo…¿yo cómo respondo?”
Yo con mi vida ¿estoy respondiendo?. ¿Estoy dando buena respuesta a eso más importante que hay que cumplir en la vida: que es amar a Dios y a los demás?
Amar a Dios (no solo con la mente, o con la devoción) sino con el ser, con la existencia entera.
Amar a los demás, tratándoles como a mí me gusta (me gustaría) que me traten.
Saber responder nos hace responsables. Responsables y dignos ante la vida, ante la Tierra, ante los demás, ante Dios.
Porque al final…. (Decía Pedro Casaldáliga en su poema)
“Y al final del camino me dirán:
¿Has vivido? ¿Has amado?
Y yo, sin decir nada,
Abriré mi corazón lleno de nombres”
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Cada jueves a las 19,30h y cada sábado a las 19,00h (Dos días para que elijas el que mejor te vaya) abrimos en BerriOna un espacio que llamamos “La Palabra”.
Te invito a acercarte y conocer y compartir el Evangelio de Jesús de Nazaret.